Muface lleva 36 años pagando los gastos del edificio que controla la familia Gómez
Muface asume con fondos públicos gastos como limpieza y conserjería, así como una reparación de 200.000 euros

Entrada a la finca, con la puerta a la sauna -de azul- a la izquierda. | THE OBJECTIVE
Desde pequeñas reparaciones a grandes obras en la fachada y tejado por un valor superior a los 200.000 euros. Muface ha cubierto con fondos públicos durante casi cuatro décadas los gastos derivados del uso del edificio de San Bernardo 38, controlado durante años en su totalidad por la familia de Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez. Actualmente tiene arrendados el local del bajo -donde se ubicaba la famosa sauna Adán que regentó Sabiniano Gómez, padre de Begoña Gómez-, el primero y el ático. Este último situado en la sexta planta y que durante años operó como una pensión para la clientela de la sauna y, posteriormente al cierre de esta, como apartamentos turísticos. La familia Gómez paga por el alquiler poco más de 850 euros. Las tres propiedades están tasadas en más de 1,2 millones de euros. En el pasado controlaron prácticamente la totalidad de las seis plantas.
Muface corre con todos los gastos comunes de los 72 inmuebles de su «Fondo Especial» que alquila a terceros, como los tres que tiene arrendados la familia de Begoña Gómez. Desde pequeñas reparaciones en los pisos y locales hasta obras de gran envergadura, pasando por el servicio de limpieza. Así lo confirma un documento del Tribunal de Cuentas al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, en el que se reseña que «los gastos del patrimonio inmobiliario del Fondo Especial se deben a reparaciones, a conservación, a gastos correspondientes a las comunidades de vecinos y a los del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)». También incluye las reparaciones en el interior de los domicilios.
En 1997, el edifico fue sometido a una obra de gran calado en su fachada, debido al paso del tiempo y a deficiencias estructurales. Se tramitó de urgencia y por subasta ante Muface. En esas obras, además, se reparó el tejado y se sustituyó por uno nuevo, según ha podido saber este diario. Fue la mayor obra que se ha acometido en el edifico desde que llegó allí la familia Gómez en 1989, y el coste ascendió a más de 34 millones de pesetas, por encima de los 200.000 euros. Por aquel entonces, el alquiler del ático rondaba los 300 euros.

Los gastos corrientes del edificio, como limpieza y conserjería, también son cubiertos por Muface. Se pagaban en parte a través de las cajas pagadoras ubicadas en la Sede Central de la mutualidad. Al igual que ocurrió con las rentas, los gastos en reparaciones eran aprobados por un administrador de fincas en Madrid hasta que en 1997, tras una inspección, el Tribunal de Cuentas detectó irregularidades en este sistema y en el cobro de la renta.
Muface asegura que cualquier decisión sobre el «uso y disposición» de estos inmuebles «ha de tener en cuenta su condición de bien afecto al fin específico de financiación de las prestaciones a favor de los antiguos mutualistas, a fin de garantizar la máxima rentabilidad de los recursos obtenidos de tales bienes». Sin embargo, no revelan el balance de ingresos y gastos correspondiente a este inmueble concreto.
Tasado en 1,2 millones
Muface aseguró en 2024 los inmuebles de su fondo de viviendas con una póliza de seguros que garantizaba el continente ante incendios o cualquier otra calamidad que dañase las propiedades. En esa poliza figuran los tres inmuebles alquilados a precio de ganga a Sabiniano Gómez Serrano y su hermano, Enrique Francisco.
En ese contrato con una aseguradora, Muface deja constancia de la tasación de las viviendas y el bajo, en el que se ubicaba la sauna Adán. El local de la sauna está tasado en 635.819 euros, y el primer piso -también operado por la sauna- en 356.243 euros. El ático, situado en la sexta planta, tiene un valor de 223.791 euros. Este último, tal y como ha revelado THE OBJECTIVE, está asociado a una renta de poco más de 850 euros. En total, las valoraciones de los inmuebles que a día de hoy siguen bajo el control de la familia Gómez suman algo más de 1,2 millones de euros.

Desde finales de los 80
La familia política de Pedro Sánchez controló la gran mayoría de plantas de este edificio desde finales de los años 80, fecha en la que se inició el arrendamiento con Muface. Fue ahí cuando echó a andar la sauna Adán, uno de los negocios sexuales más emblemáticos de la cartera de prostíbulos y locales de encuentros que gestionó Sabiniano Gómez, padre de Begoña Gómez, y su hermano Enrique Francisco -hoy titular de este triple alquiler-.
Los Gómez pagan por los tres inmuebles una renta en condiciones significativamente ventajosas respecto al mercado. El ático, por ejemplo, lo pagan a poco más de 850 euros mensuales, un precio por el que en esa zona se encuentra en el mercado un estudio interior, con vistas a un patio y menos de 30 metros cuadrados. El ático tiene 139 metros cuadrados, que fueron reconvertidos en 14 habitaciones para alquilar por horas y días. En una sola noche de reservas completas, a entre 60 y 90 euros la noche, el negocio facturaba suficiente como para pagar la renta de un mes.